12 de enero, más tarde:

Verificación de la señal que recibimos desde el satélite.  

 

A.Z. es el encargado del manejo del equipo de telecomunicaciones y también un escalador profesional. Aquí verificando nuestra posición vía GPS. 

 

15 de enero:

levantamiento del campamento. Continuamos con dirección al norte.

 

16 de enero:

Encuentro con un herrerasaurus muy agresivo. Nos refugiamos en una cueva fuera de su alcance, pero nuestros disparos no lograron ahuyentarlo. Acordamos intentar capturarlo.

Este es el momento en que decidimos dispararle dardos tranquilizantes. Resultó ser un macho adulto. Aún se discute si esta clase de dinosaurio caza en manada o en solitario.   

 

20 de enero:

Después de días de caminar por la selva, vimos a lo lejos a un spinosaurus y decidimos seguirlo a una distancia prudencial. Gracias a nuestra curiosidad pudimos verlo luchar contra otros dinosaurios, demasiado grandes como para que los capturásemos:

22 de enero:

Hemos estado tras las huellas de un deinonychus durante varias horas. Parecía haberse separado de su manada. Necesitamos su patrón genético para compararlo con los deinonychus que hemos criado en cautiverio.

Esperamos pacientemente a que atrapara a su presa y la devorara. No necesitamos enfrentarnos al dinosaurio, dejó muestras de su piel y su saliva en los restos de su comida.

 

23 de enero:

Revisión de las trampas para dinosaurios que dejamos. 

<<<---- Pequeño error: en una de nuestras trampas cayó un lince. Después de comprobar su estado de salud, lo dejamos en libertad.

25 de enero:

Regreso al Área Omega. 

Durante el camino nos encontramos con varios zorros fénec. Hasta ahora se creía que solamente vivían en los desiertos.

 

27 de enero:

Nos detenemos durante la mañana para reparar uno de los jeeps. Mallory y el Dr. Helheim se internan en el bosque para buscar agua para el motor. 

Ambos regresaron minutos después seguidos por una acompañante indeseable: una leona. El rugido de los motores bastó para ahuyentarla.

 

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